martes, 11 de diciembre de 2007

TIPOS DE EVALUACIONES DE IMPACTO AMBIENTAL

Los tipos de evaluación son los siguientes:
  • EVALUACION PRELIMINAR:

Son estudios de impacto ambiental desarrollados con información bibliográfica disponible que reemplaza al EIA en aquellos casos en que las actividades no involucran un uso intensivo ni extensivo del terreno, tales como la aerofotografía, aeromagnetometría, geología de superficie, o se trate de actividades de reconocido poco impacto a desarrollarse en ecosistemas no frágiles. Son estudios que el proponente elabora para contrastar la acción con los criterios de protección ambiental y que le ayuda a decidir los alcances del análisis ambiental más detallado.

Las EIA. Preliminares, son un avance de la evaluación final basado fundamentalmente en la documentación existente, cuyo contenido debe aportar, como mínimo, la siguiente información:

a) La descripción detallada de la actuación de que se trata y, en su caso, de Las posibles alternativas.

b) Una primera aproximación a la definición del entorno afectado, entendido éste como el contexto físico, biológico, socio económico, político, cultural, administrativo y humano en el que se enmarca la actuación y que es susceptible de resultar alterado.

c) Una identificación de Los principales impactos ambientales que puedan deducirse de la actuación.

d) Una propuesta razonada relativa a la necesidad o conveniencia de seguir o no el estudio por medio de la elaboración de una E. I. A. detallada o simplificada, total o parcial.

e) Un avance de la metodología que se considera más conveniente para la valoración de Los impactos y para la participación de la población afectada, si fuera aconsejable seguir con el estudio.

f) Una propuesta de medidas correctoras, si se estimaran convenientes y con ello no se creyera necesario seguir con el estudio.

  • EVALUACION SIMPLIFICADA:

Procedimiento destinado a valorar los efectos ambientales que se deriven de la ejecución de un proyecto de menor incidencia en el entorno y respecto del cual la detección o corrección de impactos ambientales puede ser simple.
No se exige aquí un nivel de profundización demasiado elevado, en la redacción del Estudio de Impacto Ambiental pasando por alto aspectos que carezcan de interés relevante. La valoración del impacto se hace en forma numérica sencilla, describiendo los criterios y parámetros utilizados en la valoración. No se exige ponderación de impactos ni una valoración global, excepto en los casos en que haya que decidir entre varias alternativas. En este tipo de evaluación se incluye un documento de síntesis que será expuesto públicamente, por cuya razón habrá que poner especial énfasis en la redacción de un documento escrito en un lenguaje comprensible para personas no técnicas.

  • EVALUACION DETALLADA:

La evaluación detallada de situaciones de riesgo contempla esquemáticamente los siguientes pasos:
1. Identificación del problema: investigar el problema en detalle mediante la recopilación de información sobre sus causas y efectos, así como sobre sus eventuales interrelaciones con otros riesgos; identificar las personas o los grupos que puedan estar expuestos y desde cuándo, quiénes pueden ser considerados de alto riesgo; la observación de las condiciones de trabajo y la experiencia de los trabajadores completarán la definición inicial del problema.

2. Definición de criterios de riesgo: estándares de calidad del aire, límites biológicos de exposición, criterios legales, indicadores de salud, etc. son los criterios que determinarán cuándo consideraremos un riesgo suficientemente controlado y cuándo no. Estos criterios son los que permitirán seleccionar la información relevante para evaluar el problema de que se trate y, al mismo tiempo, son los que servirán de referencia para evaluar la idoneidad de las medidas de control que se implanten.

3. Recopilación de información: recoger la información relevante y suficiente, de acuerdo con los criterios previamente establecidos, sobre la situación de riesgo que se pretende evaluar, utilizando para ello los procedimientos técnicos adecuados en cada caso (muestreo ambiental, mediciones, cuestionarios, inspecciones de control, registros, indicadores, etc.) y contando con el asesoramiento de expertos que se requiera.

4. Evaluación de la información: con la información obtenida se trata ahora de comparar la situación investigada con los criterios de riesgo previamente establecidos con el fin de emitir un juicio crítico sobre la necesidad o no de adoptar medidas de control y el grado de prioridad o de urgencia de las mismas así como sobre el posible impacto de los cambios en la solución del problema.

5. Proposición de opciones de control: cuando se considera que hay que hacer algo se debe poner a disposición de los responsables de la toma de decisiones las recomendaciones de intervención, la información técnica que permita la puesta en marcha de dichas recomendaciones y las estimaciones sobre los costos y beneficios tanto en términos económicos como preventivos de las distintas soluciones posibles.

6. Valoración de eficacia: la introducción de cambios en base a la información proporcionada debe ser valorada a posteriori en términos de eficacia preventiva, es decir, se debe verificar (mediante controles ambientales, indicadores de salud, satisfacción de los trabajadores, etc.) si en base a los criterios establecidos para valorar el riesgo se puede afirmar que la intervención ha resuelto el problema. En caso contrario se deberá reevaluar la situación.

El estudio técnico de impacto ambiental que incorpora este tipo de evaluación se realiza cuando una actividad puede producir grandes impactos, en los que se exige un grado de profundización elevado. Se incluye aquí la ponderación y evaluación global, así como un Documento de Síntesis que se expondrá públicamente como resumen de los estudios efectuados, conclusiones, medidas correctoras, estudio de alternativas etc., editándose en un volumen independiente.